DE NEGRO
Y sí, hacía un calor insoportable.
Estaba sentado, con la puerta abierta, sin corriente, sin respiro.
Me dieron los buenos días, sonreí.
Con una canción que no paraba de repetirse, con una camisa de lino blanca y un pantalón.
-Dios qué calor!-
Demasiado pronto para una cerveza, tarde para otro café, perezoso para un triste vaso de agua.
Con el mono puesto, como antaño - dos meses lo menos...- a la espera, a un día, a unas horas, unas pocas nada más.
Esperaría a mediodía. Esperaría para tomarme esa cerveza que refrescara mi cuerpo, que lo pusiera en marcha.
Frente a mí, la ilusión;
Al lado, pegado como el sudor de un cuerpo vestido en negro, precioso, sexy, arrebatador....el ansia.
Egun on....